Antiguamente, se creía que la Biblia tenía que ser leída al pie de la letra; por ejemplo, la gente creía que el mundo había sido creado en siete días como cuenta el relato de la Creación. Ahora sabemos que la Biblia está escrita para transmitir el mensaje de Dios a las personas, pero de formas diferentes. Hay relatos que son simbólicos, otros son más históricos, algunos no necesariamente sucedieron así... Pero es importante que sepamos que todos ellos nos hablan del amor de Dios.
¿Quién escribió la Biblia?
La Biblia no tiene un solo autor. Son muchas las personas que han intervenido en su redacción, y todos sus libros se escribieron al mismo tiempo. Muchas de sus historias primero se transmitieron oralmente de generación en generación, y luego, se pusieron por escrito. Lo que sí tienen en común es que todos los libros están inspirador por Dios.
Lenguas en las que se escribió la Biblia
La Biblia se escribió originalmente en tres lenguas: hebreo, arameo y griego. La mayor parte del Antiguo Testamento está escrito en hebreo; el arameo se utiliza en algunos libros del Antiguo Testamento. El Nuevo Testamento está escrito en griego, excepto el evangelio de Mateo, que está escrito en arameo.
El canon bíblico
El canon bíblico es la lista de los libros que están incluidos en la Biblia. La palabra canon significa 'medida' o 'norma'. El canon cristiano tiene muchos años se elaboró en el 382 d.C. Cuando se decidió qué libros debían considerarse parte de la Biblia, se encargó a san Jerónimo la traducción al latín, que era la lengua que hablaba la mayoría de la gente. Esta Biblia se llamó Vulgata.
Para entender los textos bíblicos
Para entender bien los libros bíblicos es necesario conocer las circunstancias y el contexto de los destinatarios de los mismos. Por ejemplo, Pablo escribió, en una ocasión, a los cristianos de Roma, que eran pocos. Tenían problemas entre ellos y no entendían bien cómo rendir culto a Dios. Con esta clave podemos entender mejor sus palabras.
Citar textos bíblicos
Para citar textos de la Biblia, utilizamos un sistema especial. Primero aparece el nombre del libro al que pertenece el texto de manera abreviada (Mt); al lado, el número del capírtulo (Mt 28) y, a continuación, detrás de la coma, los versículos que tenemos que buscar (Mt 28, 16-20).
El Pentateuco y la Torah
Los judíos y los cristianos tenemos una gran parte de la Biblia común. Lo que nosotros llamamos Pentateuco para ellos es la Torah, la Ley, y es una parte muy importante de las escrituras judías. En el Corán también encontramos personajes e historias que aparecen en la Biblia: Adán, Noé, Abraham, Jesús de Nazaret...
Libros proféticos
Una parte importante de la Biblia son los libros proféticos, que cuentan las historia de los profetas.
Su lenguaje es difícil de entender en ocasiones. Pero también tienen pasajes muy bonitos que hablan cómo Dios quiere a su pueblo y cuida de él.
Los profetas denunciaban las injusticias y enseñaban el mensaje de Dios, por eso son muy importantes.
Los libros de Sabiduría
En la Biblia hay unos libros que son especiales, son los llamados de Sabiduría. En ellos encontramos oraciones, poemas de alabanza a Dios, proverbios, historias... Por ejemplo, el libro de los Salmos se compones de oraciones de alabanza para ser cantadas, de salmos en los que se pide ayuda a Dios, se hace memoria de cosas pasadas, se pide perdón...
Los evangelios testimonios de fe
Al leer los evangelios debemos ser conscientes de que su pretensión no es contarnos la vida de Jesús sin más. Los evangelios están escritos como testimonio de fe en Jesús. Sus autores querían transmitir a las comunidades a las que se dirigían que Jesús era el Hijo de Dios que Él había enviado para traernos la Salvación. Por eso no debemos acercarnos a ellos como si fuésemos a leer una biografía de Jesús.
Evangelios sinópticos
Los evangelios sinópticos son los evangelios de Marcos, Mateo y Lucas. Se llaman así porque muchos de sus textos coinciden y se pueden leer de forma paralela, ayudándonos a comprender mejor el significado de los mismos. Este texto aparece de tres manera parecida, pero siempre suele haber matices o cosas que lo hacen singulares, ya que cada uno de los evangelistas se dirige a una comunidad diferente y pretende recalcar aspectos distintos de Jesús.
El Apocalipsis
El último libro de la Biblia es el Apocalipsis. Es un libro muy difícil de leer y entender, ya que está lleno de visiones, imágenes, símbolos... Se escribió para dar ánimo a unas comunidades cristianas que se encontraban en dificultades. Su mensaje más importante es que Dios siempre estará con nosotros por encima de todos los problemas y que Jesús vencerá al mal y al dolor.
María: parte fundamental en la misión de Jesús
María tiene un papel muy importante, y leyendo la Biblia comprendemos que ella es una parte fundamental de la misión de Jesús.María da a luz a Jesús en Belén; lo cuida y lo educa en Nazaret; está Él en Caná y lo anima a actuar; lo acompaña en la cruz... En los evangelios encontramos textos que nos hablan de ella y de su gran fe en Dios.
La Biblia en la historia de nuestra literatura
Cuando uno se asoma a la historia de nuestra literatura española, no puede menos de sentirse con resonancias, ecos, glosas, comentarios, alusiones, versiones, inspiraciones sacras tomadas de la Biblia. Tal es el caso del primer texto en lengua española 'Glosas Emilianenses' del siglo X, las jarchas mozárabes de los siglos XI y XII, 'el Cantar del Mio Cid', cantares del siglo XIII, obras de Fray Luis de León, Santa Teresa, San Juan de la Cruz, Lope de Vega, Calderón de la Barca, Cervantes...
Teofanías
A lo largo de la Biblia encontramos numerosos textos que nos cuentan cómo Dios se manifiesta, se acerca y llama a distintas personas para que cumplan una misión. En esos encuentros podemos ver cómo aparecen algunos elementos que quieren simbolizar o representar a Dios: la nube, el fuego que no se consume, el viento... Esto se conoce como "teofanías".
La edad en la Biblia
La Biblia dice de Abraham que vivió 175 años. Eso no es nada. Noé vivió 950 años. De Matusalén se dice que llegó a mil.
Cuando se compuso la Biblia, los años no se contaban como ahora. El hecho de atribuirles tantos se hizo para indicar su importancia en la historia de Israel.
