Un día, rodeado de sus discípulos y de una gran multitud, subió al monte y pronunció un largo discurso, conocido como el Sermón de la Montaña: "Vosotros sois la sal de la tierra (...). Vosotros sois la luz del mundo (...). Brille vuestra luz ante los hombres, para que vean vuestras buenas obras y den gloria a vuestro Padre que está en los cielos" (Cfr Mt 5,13-26).
"Sermón de la montaña", Cosimo Roselli |