jueves, 27 de noviembre de 2025

El sentido de la misión de Jesús

La respuesta al sentido de la misión de Jesús en este mundo tiene dos partes:
a) El ser humano busca a Dios: el ser humano, hoy y siempre, aspira a ser feliz y a vivir en armonía. Sin embargo, todos los días comprueba lo difícil que es conseguirlo.
Estas aspiraciones son las que han dado origen a las diversas religiones a lo largo de la historia: por medio de ritos, sacrificios, oraciones,... la persona busca relacionarse con la perfección infinita de esa Divinidad que intuye a tientas en si interior y en la creación. Y en esa elevación se produce también una mejora en su relación con los demás.
b) Dios busca al ser humano: además de grabar en el corazón del hombre ese deseo de alcanzarle, Dios tomó la iniciativa para darse a conocer, facilitarle el encuentro y traerle esa salvación que necesita y a la que aspira.
Dios se manifestó, progresivamente, por medio de la historia del pueblo de Israel. Es la historia que recoge el Antiguo Testamento.
Esa historia llega a su plenitud en Jesucristo, como nos cuenta el Nuevo Testamento.
Jesucristo fundó la Iglesia para que su mensaje y su salvación llegara a toda la humanidad de todos los tiempos.


Así pues, Jesucristo, vino a dar respuesta a ese anhelo de Dios y de salvación presente desde siempre en el corazón del ser humano.